Actualmente no participo con ningún panel de seguros y se me considera un proveedor fuera de la red. Esto me permite ser lo más flexible posible con su tratamiento y lo más confidencial posible. Puedo proporcionarle una superfactura al final de cada mes para que la envíe a su seguro en caso de que puedan reembolsarle. Las compañías de seguros dictan cosas como la duración del tratamiento y las sesiones, y requieren que se le diagnostique un trastorno de salud mental para que se pague la terapia. Este diagnóstico permanece permanentemente en su registro de salud. Las compañías de seguros también tienen el derecho de auditar sus archivos y notas de terapia, y hacer preguntas a su terapeuta sobre su tratamiento. Estas son algunas de las razones por las que he optado por no aceptar un seguro en este momento.